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El Gobierno ofrece a los empresarios más de 350 millones de euros en ayudas a pymes de varios sectores, como la hostelería y el comercio, como última bala para intentar un acuerdo social en la reducción de la jornada laboral. El Ministerio de Trabajo ha explicado que la propuesta incluye ayudas de “hasta 6.000 euros” para las empresas, micropymes de menos de cinco trabajadores, con el objetivo de que mejoren su productividad.
El secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, ha desgranado este martes la “última propuesta” del Gobierno a la patronal CEOE, en una rueda de prensa al término de la mesa de negociación con los sindicatos y patronales mayoritarias. Las ayudas a la productividad se enfocan para las empresas de menos de cinco empleados en cinco sectores productivos: la hostelería, el comercio, las peluquerías, la limpieza y la agricultura.
En total, el Gobierno estima que se podrían beneficiar de la medida unas “470.000” pequeñas empresas de estas cinco actividades, que el ‘número dos’ de Yolanda Díaz ha argumentado que se han seleccionado por sus índices de productividad y su mayor gap (margen) entre las jornadas laborales de sus trabajadores y el compromiso del Gobierno de las 37 horas y media a la semana.
Estas ayudas se unen además a las bonificaciones que el Ministerio de Trabajo ha ofrecido a las empresas con menos de 10 trabajadores para las nuvas contrataciones y conversiones de empleados parciales a tiempo completo debido a la reducción de jornada. Estas, que no han quedado aún concretadas en su cuantía (“entre el 20% al 100%”), se aplicarían de manera general, sin distinguir sectores.
Pide a la patronal “un sí o un no”
“No puede haber ninguna duda del compromiso del Gobierno para intentar un acuerdo”, ha insistido en varias ocasiones Joaquín Pérez Rey. El secretario de Estado de Trabajo ha recordado que esta ha sido la reunión número 13 de la negociación para reducir la jornada laboral, “la norma más importante de la legislatura”, que se han celebrado en “casi diez meses” de diálogo social.
Dado ya este margen, el secretario de Estado ha insistido en el mensaje que ha repetido también la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, en los últimos días: “Esta mesa entra en su recta final”.
Pérez Rey ha emplazado a los empresarios a que den un “sí o un no” en la próxima reunión del diálogo social, que ha fechado el próximo lunes 11 de noviembre. Si no hay acuerdo, la intención de Trabajo es cerrar un acuerdo con los sindicatos y llevar la norma al Congreso “lo antes posible”.
Si no hay acuerdo, se ponen en juego las ayudas
La oferta de las ayudas a las pymes y micropymes está condicionada a que se logre un acuerdo tripartito en el diálogo social para reducir la jornada laboral, ha explicado Pérez Rey. Si las patronales no entran a un pacto, la propuesta del Gobierno ya no será la misma, ha reconocido el ‘número dos’ de Yolanda Díaz, con vistas a lograr un acuerdo solo con los sindicatos.
Es decir, que los empresarios se juegan las ayudas a las empresas si se levantan de la mesa de negociación, algo que desde el Ministerio y los sindicatos han situado como un elemento lógico de toda negociación. “Tiene que haber incentivos para negociar”, indican.
Carlos Bravo, secretario de Políticas Públicas y protección Social de CCOO, y Fernando Luján, vicesecretario general de política sindical de UGT, han insistido en que la negociación se ha retrasado ya “más de lo razonable” y han emplazado a los empresarios a que aclaren si van a pactar la medida.
En caso contrario, las ayudas a las empresas no son la prioridad de los representantes de los trabajadores, han advertido los sindicatos, pero sí lo son la mejora del registro horario, de los derechos de desconexión digital y la rápida aplicación de las 37 horas y media.